¿Quién dijo que estás sola?
Déjame decirte, Madre,
que aunque no todos tus hijos te amen,
tienes millones que cada día despiertan
y entienden…
Déjame decirte, Madre,
¡Que bendigo tu suelo y tu sustentarme!
Aprecio tu calor, tus verdes, tus rojos,
admiro tus azules, tu frío, tus profundidades
tus latitudes…
Déjame decirte, Madre,
que sé que estás de parto.
Otra tierra en tu vientre estás gestando.
Y lloras, te estremeces, te enciendes,
estás gimiendo…
Pero, ¿quién dijo que estás sola?
Sostenida por hilos de amor invisibles,
entre tules de luz de prístinas ondas,
el Universo entero toma tu mano
y te asiste…
Déjame decirte, Madre,
que la Ignorancia y la Indolencia se disculpan,
que el Desamor y la Violencia se retiran,
y se van con aquellos que deben irse,
se extinguen…
Dèjame decirte, Madre,
que la joya en tu interior resplandece,
el Nuevo Mundo ya casi corona,
y tus hijos lloramos y reímos contigo.
Por fin, amanece…
¡Madre Gaia, estamos contigo!
Abril, 22, 2010
